SABADO 16 DE MAYO, 10:30 HORAS AM

Sábado 16 de mayo, 10:30 horas am...

Quiero narrar lo ocurrido durante esta mañana, a pesar de que ya está la oportuna denuncia presentada ante la Guardia Civil, porque pienso que todos hemos de concienciarnos del peligro que supone para nosotros y nuestros vecinos el comportarnos irresponsablemente.

El sábado por la mañana después de desayunar nos dispusimos a preparar la comida para irnos a la playa con nuestra peque. En eso estábamos, liadas entre sartenes, cuando empezamos a sentir olor a quemado, y no venía de la cocina que era donde por suerte estábamos todos en ese momento, (gracias que Golfete y Leo no pierden de vista ni un minuto a su hermanita y Duna nos sigue por toda la casa allá donde vamos), de manera que salí al salón y se me vino el mundo encima cuando resultó que el comedor parecía una cueva de lo oscuro que estaba por todo el humo que ya había entrado desde el balcón, donde a lo lejos se veían las llamas que prácticamente ya llegaban al techo. No se si fue imprudencia o lo que nos ha salvado de perder la casa, pero reaccionamos de inmediato y con mantas, toallas, agua... en pocos minutos conseguimos acabar con el incendio. De haber estado sola en casa los hechos se hubieran desarrollado de manera muy distinta, y no soy cobarde, pero la reacción de Yoli fue digna de la mejor de las heroínas y al mando de la situación consiguió acabar con las llamas, pobre, sufrió quemaduras de segundo grado en piernas y manos pero ahora es lo que menos duele, realmente aun estamos en estado de shock ante lo que hubiera podido suceder si transcurren solo unos segundos más antes de salir de la cocina.

Cuando acabamos con el fuego y aun no entendiendo lo que estaba sucediendo oímos las sirenas de los bomberos que se acercaban a casa, de inmediato también llegó la policía local y el cuerpo de la Guardia Civil (¡vaya cuerpo!), un vecino del bloque contiguo advirtió el fuego antes que nosotras y llamó a los bomberos, y aunque cuando llegaron la situación ya estaba controlada agradecimos mucho la presencia de todos porque nos tranquilizaron, y en unos instantes después que inspeccionaran la zona y observaran la corriente del aire enseguida tuvieron claro que el origen de todo había sido una colilla que habían dejado caer desde un balcón superior... Todo prendió de inmediato porque justo donde se originaron las llamas estaba una de las casitas de los gatos, y ardió con suma facilidad prendiendo fuego también al césped artificial con el que estaba enmoquetada la terraza.

En fin, quemarnos nos quemamos, pero no en la playa. Después de acudir a urgencias la Guardia Civil se puso en contacto con nosotras, necesitaban que pusiéramos la denuncia a pesar que ellos ya tenían todo el informe redactado, en esos momentos era lo que menos nos apetecía pero nos alegramos de la larga espera, todo esto irá a juicio y aunque por supuesto no podemos acusar a nadie porque la colilla pudo caer de varias plantas, al menos esperamos que sirva para tomar conciencia de que las cosas que leemos en la prensa y vemos en televisión pueden ocurrirnos en cualquier momento, aprendamos a comportarnos como personas civilizadas, el precio a pagar por una imprudencia es muy alto.

Y a todo esto, ¿donde estaba Duna...? En el rincón más aireado de toda la casa, en la galería, con un semblante que reflejaba pánico, pobrecita...